Si estás siguiendo una dieta para perder peso, seguramente tienes la duda de si deberías eliminar los lácteos para adelgazar. La respuesta corta - y que seguro te la habrá dicho el nutricionista - es que ningún alimento ‘engorda’ por sí solo, sino que subir de peso se debe a un cúmulo de factores. Entonces, ¿son los lácteos el demonio? Aquí lo descubriremos.
Los mitos en torno a los lácteos llevan ya un buen tiempo, quizás porque muchos de ellos tienen un alto contenido en grasa, pero no todos son así. Además, aunque haya personas a las que les sientan mal los lácteos, nunca deberías suprimir ningún grupo alimenticio de nuestra dieta. Eso solo nos haría caer en la ansiedad.
Hay que tener en cuenta que los lácteos –sean yogures, leche, quesos, suero, etc.- son fuente de calcio, fósforo, magnesio, potasio, contiene vitamina D, A, B12 y proteínas de alto valor biológico. Por ello, eliminarlos de la dieta podría ser más perjudicial que bueno.
En el 2017, la Organización Mundial de la Salud, señaló que dejar de consumir leche y no reemplazar su calcio por otros alimentos, podría ocasionar deficiencia de yodo en las personas.
En realidad, solo si somos intolerantes a la lactosa. Sin embargo, en la actualidad existen lácteos sin lactosa u otros que naturalmente contienen menos, como los quesos curados y semicurados. En todo caso, hay que consultar con un nutricionista para saber qué lácteos deberíamos dejar de consumir y cuáles no.
El principal problema con los lácteos es que algunos de ellos tienen un porcentaje de grasa elevado, lo cual aumenta el consumo calórico. Sin embargo, existen tantas variedades de lácteos, que es muy fácil elegir los que nos ayudan en las dietas para bajar de peso.
Asimismo, hay que tener en cuenta que los lácteos –en cualquiera de sus versiones- nos sacian y eso es fundamental en una dieta de adelgazamiento.
Vamos con los mejores lácteos para perder peso
El yogurt natural, sin azúcares añadidos, es una excelente fuente de proteína. Una de las razones es que las células de calcio queman mucha más grasa que las que no lo tienen, por lo que sí aceleraría la pérdida de peso.
Otra razón –y no menos importante- es que el yogurt contiene probióticos, una bacteria necesaria para la salud digestiva e intestinal y que, además, puede ayudar a disminuir la cantidad de grasa que absorbe el cuerpo.
Quizás es el más consumido y venerado por los fanáticos del gym. Este yogurt es muy parecido al natural, pero en su realización se le quita el suero dando así una textura más cremosa. Además, si eliges versiones reducidas en grasa y altas en proteína (sin azúcares añadidos), entonces tendrás un super alimento bajo en calorías, que da mucha saciedad.
Debido a su sabor neutro, el yogurt griego puede servirte para hacer salsas, mayonesa light o hacer preparaciones dulces o saladas. También es increíble cuando lo mezclas con avena o frutos secos.
La leche es un alimento completísimo y una proteína de alto valor biológico, que contiene mucho calcio y minerales. El único problema es que su versión natural tiene mucha grasa, por ello los especialistas recomiendan elegir la variedad semi o descremada.
La leche no solo es rica, sino que tiene la virtud de acelerar el metabolismo y mantenerte saciada por más tiempo. Además, puedes combinarla con café, cacao o con tu batido de proteínas. Puede servir como un excelente post entrenamiento.
Otro producto estrella por los fanáticos del gym. Este queso es bajo en calorías (tiene 80 calorías por 100 gramos), bajo en grasa (no tiene casi nada) y bajo en índice glucémico, lo que lo convierte en imprescindible para perder peso.
Además, contiene suero de leche y caseína, proteínas que nos permiten saciarnos más rápido.
Tiene una textura ligeramente granulada, es suave y de sabor neutro, de ahí que podamos preparar comidas saladas o dulces con él. ¿Te da hambre por las tardes? Consume unos 50 o 100 gramos de queso cottage con frutas de tu elección y chorro de sirope sin azúcar.
Entre 3 y 4 porciones, siempre cuidando la cantidad y haciéndolo de acuerdo a la ingesta de calorías diarias. Es importante recomendar que, si quieres adelgazar, hay que evitar los lácteos altos en grasa, como los quesos curados o semicurados (mientras más duro el queso, más grasa contiene), las leches con azúcares añadidos o la crema de leche.
Te dejamos un video de Youtube de nuestro canal Método Lázaro:
Me llamo Carlos Lázaro, soy entrenador personal personal y nutricionista profesional y mi objetivo es democratizar el conocimiento y ayudar a las máximas personas posibles a mejorar sus vidas y transformar sus cuerpos. Gracias.