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¿Las semillas son realmente sanas? Te contamos sus beneficios y contras

10 de abril de 2023

Como una de las formas en que las plantas se reproducen, las semillas pueden producir una nueva planta en las condiciones adecuadas.

Como resultado, las semillas contienen una cantidad significativa de nutrientes que favorecen el crecimiento de esta nueva planta.

¿Cuan saludables son las semillas ?

El consumo de semillas está muy extendido en todo el mundo, y se pueden catalogar como un alimento saludable porque contienen:

Es buena idea incluir este tipo de alimentos en los almuerzos y meriendas porque podemos hacer meriendas nutritivas que nos aguantarán hasta la comida o la cena.

Es recomendable comer algunos de ellos solos o mezclarlos con yogur.

Una ventaja es su adaptabilidad; también se pueden añadir al pan a las ensaladas.

Se combate la inflamación

Podemos experimentar procesos inflamatorios en varios órganos del cuerpo si no llevamos una dieta sana y equilibrada, lo que puede derivar en enfermedades graves.

Comer semillas con frecuencia es una forma fantástica de medicina preventiva para nuestra salud porque alimentos como los ácidos grasos esenciales omega-3 tienen propiedades antiinflamatorias.

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Ofrecen una gran cantidad de fibra las semillas

Es crucial para nuestra salud que consumamos alimentos ricos en fibra.

Los alimentos de origen vegetal, contienen fibra y una cantidad importante de este tipo de hidratos de carbono no digeribles.

La fibra tiene una variedad de cualidades y ventajas para nuestro organismo, en particular para el estado del intestino y la flora bacteriana que allí habita.

Para combatir el estreñimiento y otros problemas gastrointestinales, es crucial.

Niveles más bajos de colesterol.

Coma alimentos como las semillas si también tiene colesterol alto.

Para estas personas, comer semillas tiene la ventaja de que controlan los niveles de triglicéridos y colesterol "malo".

Además, cualquier persona debe incluir alimentos como semillas en su dieta en este sentido; no necesita esperar hasta tener el colesterol alto para tomar medidas.

Los antioxidantes abundan en ellos.

Comer semillas tiene muchas ventajas, una de ellas es que son una excelente fuente de antioxidantes.

Una de las sustancias destacadas en este apartado, la vitamina E, tiene capacidad para combatir radicales libres que causan oxidación en nuestro cuerpo.

Dado que son tantos los estímulos estresantes de los que nuestro cuerpo debe defenderse, agradecerá esta ayuda a la hora de protegerlo.

Tomarlos también ayuda a combatir el envejecimiento.

La piel, las uñas y el cabello están a su favor.

Los oligoelementos que son buenos para la piel, las uñas y el cabello incluyen zinc, vitamina B6 y vitamina E.

El consumo de semillas fortalece cada una de estas partes del cuerpo en particular y beneficia a otras partes del cuerpo.

El consumo de alimentos como las semillas nos ayudará a mantener la salud y el brillo de estas.

También podemos hacer otras cosas con ellos, como el colágeno, que es necesario para una piel sana y sin arrugas.

Ayuda en la pérdida de peso

Las personas que quieren perder peso deben comer semillas.

Comer alimentos nutritivos como las semillas llena el estómago en detrimento de los alimentos con un valor nutricional insuficiente.

También son significativamente más ricas en fibra que otros alimentos que debemos evitar (como el pan refinado), por lo que te llenan mucho más.

A pesar de todas las ventajas que brindan, aún debemos considerar cuánto consumimos de cada uno.

Dado que las semillas normalmente constituyen una pequeña porción de nuestra dieta y ocasionalmente se consumen junto con otros alimentos, no contribuyen significativamente a nuestras necesidades nutricionales diarias en estas situaciones.

Sin embargo, agregarlo a tu dieta diaria podría ayudarte a llevar un estilo de vida saludable.

¿Cómo debemos comer las semillas ?

Por ejemplo, las semillas de calabaza se pueden comer enteras o peladas.

Las más pequeñas, como el lino, la chía o el sésamo, generalmente se comen enteras, sin masticar y con la cáscara aún puesta.

Debido a esto, a nuestro organismo le cuesta absorber los nutrientes que contienen; por lo tanto, se recomienda que consumamos estas semillas molidas o hidratadas para beneficiarnos al máximo de su contenido nutricional.

Se pueden incorporar a nuestra dieta de varias maneras:

Con verduras: en ensaladas, cremas o salteados.

Con lácteos o bebidas vegetales: en yogur, leche con avena, y bebidas vegetales con muesli.

La avena casera, las galletas de lino y el pudín de chía son ejemplos de postres saludables.

Pan: Para darle más valor nutricional a tu pan casero, también puedes agregarle semillas.

Contras de las semillas

hemorragia y presión arterial baja

Las semillas de chía tienen un alto contenido de ácidos grasos Omega-3, que pueden causar adelgazamiento de la sangre y un sangrado más intenso si se consumen en grandes cantidades.

Además, particularmente en aquellos que ya tienen problemas de presión arterial, podría provocar una caída en la presión arterial.

Una alergia

Es poco común que alguien se vuelva alérgico a las de chía, pero puede suceder.

Erupciones, urticaria, ojos llorosos, dificultad para respirar, vómitos, diarrea y lengua hinchada son algunos de los síntomas que se manifiestan.

problemas del sistema digestivo.

Las de chía son excelentes para la digestión porque están cubiertas de un polisacárido y tienen un alto contenido de fibra. Sin embargo, sus efectos secundarios, especialmente cuando se toman en exceso, pueden causar que algunas personas experimenten estreñimiento, hinchazón y gases intestinales excesivos.

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