¿Por qué nos cuesta tanto perder grasa?
7 de febrero de 2023
Una pregunta recurrente entre la gente que quiere bajar de peso es por qué cuesta tanto perder grasa o por qué se suele ganar con tanta facilidad. Y es que basta un fin de semana de deslices, algo de vida sedentaria y otra vez la grasa se acumula sin descanso.
Pero esto no sucede mágicamente. Hay muchos detalles -a veces ni los notamos- que evitar que perdamos grasa. Por eso, hoy te lo contamos en este artículo.
Perder grasa no es igual que perder peso
Existe una eterna confusión entre perder grasa y perder peso, cuando en realidad no son lo mismo. Perder peso significa bajar todo el peso corporal, a veces eso significa perder músculo, grasa y agua. En cambio, perder grasa es bajar de peso gracias y específicamente a la pérdida de masa grasa.
Si alguna vez haz hecho alguna dieta milagro y has bajado rápidamente, déjame decirte que haciendo eso, más que grasa, has perdido masa muscular y agua. ¿Y qué pasa cuando perdemos masa muscular? Pues se da el temido efecto rebote.
Por eso, si quieres perder grasa, debes enfocarte solo en eso, más que en el peso. Obviamente perderás kilos, pero sin comprometer tu masa muscular. Algo que lograrás sí o sí con ejercicio y una dieta equilibrada y personalizada por tu nutricionista.
¿Por qué almacenamos grasa?
Vayamos a la explicación evolutiva. Hace miles de años, los humanos no vivíamos como ahora. Se cazaba, se sufría por comer y había momentos de abundancia como de escases. Por ello, el cuerpo aprendió a almacenar grasa para que esta sea nuestra reserva energética en caso de que faltaran alimentos.
Ahora, sin embargo, la escases no existe como antes y más bien, en muchos casos, tenemos demasiados alimentos disponibles. Pero el cuerpo continúa almacenando grasa como antaño.
¿La solución? Un buen régimen dietético, mucho ejercicio y una vida activa. Y algunos detalles que te contaremos a continuación.
Razones por las que no puedes perder grasa
No sabes qué comes realmente
Para perder grasa la ecuación es simple: quemar más calorías de las que gastamos. Así, el cuerpo se pone en modo supervivencia y utiliza las reservas de la grasa para funcionar. Sin embargo, si aún haciendo esto no ves resultados, es posible que algo estés haciendo mal. Quizás hiciste bien tus comidas principales, pero te pasaste con la ración de almendras, comiste más frutas de las que deberías o picabas mientras cocinabas. En cuestión de números, todo cuenta, así sea ‘ligh’.
¿Qué hacer? Lo primero es ir a un nutricionista para que calcule tus calorías diarias y cuáles necesitas para bajar de peso. Luego de ello, debería hacerte un plan personalizado basado en tus gustos y calidad de vida (de lo contrario, no funciona).
¿Debería pesar mi comida? Quizás al principio sea una buena idea, así sabrás que una pechuga y media puede ser demasiado para ti o que tantos gramos de arroz serán suficiente. Pero, tranquila, es solo por un tiempo, para que seas consciente de qué comes y cuánto comes.
No eres activo
Aquí no solo nos referimos a realizar ejercicio, sino a todo el movimiento que realizas a lo largo del día. Incluso, muchas personas que entrenan 3 o 4 veces al día, continúan siendo sedentarias si se la pasan sentadas todo el tiempo. El entrenamiento suele ser solo una hora y a veces no es suficiente.
¿Qué hacer? Controlar tu NEAT. Esto significa las actividades que realizas durante el día. Puedes incrementar tu NEAT caminando unos 10 mil pasos al día, subiendo escaleras, yendo y viniendo a hacer las compras. Para controlarlo, puedes usar un app o un Smart Watch. Verás que esos pasos simples cambiarán tu vida.
Te falta disciplina
Si eres de los que dice “el lunes empiezo la dieta”, ya estamos mal. La consistencia debería estar todos los días, a lo largo de la semana. Esto no significa vivir a dieta constante, sino todo lo contrario: si te da ganas de comer un chocolate, cómelo, pero luego continúa con tu dieta como si nada hubiera pasado. Esto te ayudará a salir del ‘modo dieta’ en el que vives y darte cuenta que todo pasa por equilibrar.
¿Qué hacer? Equilibra. Intenta dar lo mejor de ti cada día, entrenar, comer bien, incluso los fines de semana. Si sientes muchos deseos de comer algo, hazlo. Así, sin darte cuenta, la dieta o estilo de vida saludable será cada vez menos pesado. Sí, haz cheat meal, pero con moderación.
Tips para perder grasa
Ahora que conoces los errores más comunes para perder grasa. Vamos a las soluciones.
Entrena fuerza
Entrenar con pesas siempre será ideal para quemar grasa, pues al hacerlo estamos aumentando la masa muscular, que finalmente es el único que nos ayudará a bajar de peso, ya que a mayor masa muscular mayor gasto calórico.
Por otro lado, entrenar fuerza aumenta el metabolismo basal, que es el principal factor para la quema de grasas.
Dieta alta en proteínas
Aquí no nos referimos a una dieta keto, aunque sí podría servir en algunos casos. Más bien, intenta consumir proteínas en cada una de tus comidas. Las proteínas sacian mucho y, además, ayudan a mantener y hacer crecer tu masa muscular.
Ciclar calorías
Esta técnica se ha vuelto muy popular en los últimos años. Significa que no todos los días deberías consumir las mismas calorías. Por el contrario, los días que hagas ejercicio más intenso, consumes más, y los días de ejercicio poco activo, comes menos. También puedes hacer lo mismo con los carbohidratos. Psicológica y físicamente ayuda mucho.
Cardio
Cuando se trata de perder grasa el cardio es muy importante. Intenta realizarlo luego de tu sesión de pesas, o en días separados. Recuerda que es a partir de los 30 minutos de cardio cuando tu cuerpo empieza a quemar grasas.
Otro tipo de cardio genial para acelerar el metabolismo y perder grasa es el de alta intensidad, como el HIIT, el Metcon, el AMRAP, Tábata, etc.
Periodista especializada en temas de medicina, nutrición y fitness. Amante del deporte, de la escritura y los libros.
