La motivación para hacer ejercicio suele ser el mayor problema de muchas personas que no terminan de adaptarse a un estilo de vida activo y saludable. Y es que pasa que muchas veces, suelen dar el primer paso y se encuentran con la barrera de la dificultad, tirando la toalla al poco tiempo. Desde aquí queremos ayudarte a retomar el camino del deporte, brindándote consejos prácticos y efectivos para encender la chispa de la motivación y que se quede como parte de tu rutina diaria.
Todos somos afines a un ejercicio determinado. A algunos les gusta el baile, otros disfrutan caminar, otros manejar bicicleta, nadar, etc. Hoy en día, existe una variedad de ejercicios, como el rucking o el método Gallowey, por ejemplo, que puedes escoger para empezar a disfrutar del deporte. La fórmula ideal para que no abandones el ejercicio al poco tiempo es comenzar con algo que disfrutes y que lo inicies a tu ritmo. Aquí se suman tres cosas: motivación, enfoque positivo y perseverancia. Para conseguirlo, muchas veces es necesario el acompañamiento de un entrenador personal que te guíe y asesore, de acuerdo a tus necesidades.
Definir metas claras y alcanzables te brinda un propósito tangible. Estas metas pueden ser a corto plazo, como correr o caminar una determinada distancia, o a largo plazo, como mejorar tu resistencia. Asegúrate de que tus metas sean realistas y progresivas, para evitar la frustración y que te sientas satisfecho con cada logro que alcanzas.
Como te dijimos anteriormente, comenzar con algo que te guste aumentará significativamente tu motivación. Explora diferentes opciones, ya sea correr, nadar, practicar yoga o levantar pesas. Al encontrar actividades que te diviertan, convertirás el ejercicio en algo más que una tarea, convirtiéndolo en un placer.
La monotonía puede ser un asesino de la motivación. Cambia tu rutina regularmente para mantener las cosas frescas y emocionantes. Prueba nuevas clases de ejercicio, cambia la ubicación de tu entrenamiento o incorpora diferentes tipos de ejercicios para desafiar a tu cuerpo de manera diversa.
Entrenar con un amigo puede hacer que el ejercicio sea más divertido y motivador. La responsabilidad mutua y el compañerismo pueden mantenerlos a ambos en el camino correcto, incluso en días en los que la motivación es baja.
Incorpora el ejercicio en tu rutina diaria al establecer un horario regular. Al hacerlo, el ejercicio se convierte en una parte natural de tu día a día, similar a otras responsabilidades. Programa tus sesiones de entrenamiento como compromisos inquebrantables contigo mismo.
Las aplicaciones de fitness, rastreadores de actividad y programas en línea pueden proporcionar un impulso adicional de motivación. Establece recordatorios, sigue tu progreso y únete a comunidades en línea para compartir experiencias y obtener apoyo. Te servirá de mucha ayuda y de apoyo emocional.
La ropa de ejercicio cómoda y atractiva puede mejorar tu confianza y hacerte sentir bien contigo mismo mientras te ejercitas. Además, tener un conjunto de ropa dedicado para el ejercicio puede ser un recordatorio visual de tu compromiso con la actividad física.
Reconoce y celebra tus logros, ya sean grandes o pequeños. Cada avance merece reconocimiento. Puedes llevar incluso un diario de metas alcanzadas, registrar tus hitos en una aplicación o simplemente darte un pequeño regalo cuando alcances una meta importante.
Deja de ver el ejercicio como una tarea y comienza a considerarlo como una oportunidad para cuidar y fortalecer tu cuerpo. Cambiar tu perspectiva puede hacer que el ejercicio se sienta más como un acto de amor propio que una obligación.
El agotamiento físico y mental puede disminuir drásticamente la motivación. Escucha a tu cuerpo y toma días de descanso cuando sea necesario. Descansar adecuadamente permite la recuperación y evita el agotamiento, asegurando que vuelvas al ejercicio con energía renovada.
Motívate con un sistema de recompensas. Establece objetivos específicos y, al alcanzarlos, date una recompensa. Esto podría ser desde un día de descanso adicional hasta algo que realmente desees, como una cena especial o una prenda de ropa nueva.
Sigue a atletas, entrenadores o figuras inspiradoras en redes sociales o en la vida real. Observar el éxito y la dedicación de los demás puede ser motivador y recordarte por qué iniciaste tu viaje de acondicionamiento físico.
Te dejamos un video de nuestro canal de YouTube Método Lázaro sobre ERES UN VAGO 😡 según Kobe Bryant!:
Periodista especializada en temas de salud, psicología y bienestar. Amante del diseño y la pintura en acuarela.